Me gusta hacer fotografías y me gusta descubrir/saborear las de otros autores. Algo así es lo que diferencia un acto normal de otro mágico. Os lo explico...

Una fotografía, si es buena, es capaz de hacerte viajar. Casi puedes olerla, puedes saborearla y te permite crear una historia partiendo de una sola o de una que pertenezca a un proyecto fotográfico. Ponerle valor a ese trabajo es una de las cosas más importantes que hago siempre.

Es por ese motivo que en el blog habrá un apartado dedicado a numerosos fotógrafos, que de alguna manera han conseguido hacer palpitar mi retina. Y que mejor título que el de MIRADAS ADMIRADAS.

Hoy comenzamos a hablar del trabajo de Yasuhiro Ogawa.

Observando el mismo, es un mago del blanco y negro y también del color. Sus fotografías tienen un hilo que hilvana con los sentidos y sentimientos del espectador. Aquí hay unas pocas fotografías suyas que van a conseguir que, vosotros que sois devoradores de fotografías, sacien vuestra hambre por días.

Os animo a buscar el resto de su trabajo porque es increíble, aquí tenéis su web . Ha publicado varios fotolibros, entre ellos "The Dreaming", "Shimagatari" y "Cascade"

"Cascade" me ha llegado al corazón. Y es que el propio Yasuhiro, cuando murió su madre, encontró en el apartamendo de ella varios carretes de películas de 8 mm. Los proyectó  en una pared y las volvió a ver después, esta vez con una cámara en la mano. Es una experiencia íntima. Las fotos que tomó de las proyecciones de 8 mm están intercaladas con fotos de árboles, de pertenencias antiguas, de su madre moribunda. Yasuhiro nos invita a experimentar algunos de sus recuerdos más lejanos .Un libro dulce, agridulce y melancólico...como la vida misma. 

No dejen de admirar las miradas.